No tenemos prisa por amanecer

"Voy a tener tantísimas heridas que voy a querer tener un doctorado en huidas"- Loreto Sesma

Siempre llego al mismo punto.
siempre termino en el mismo sitio,
siempre con la misma sensación
Me encantaría poder huir de ti, y llegar al punto en el que el amanecer empieza a crecer, lo he planeado tantísimas veces que parece que recorro este camino todos los días.
Lo he mirado y estudiado al milímetro, pero nunca me atrevo, prefiero someterme al autocontrol de no enloquecer cada vez que me dices que vas a cambiar. Lo peor de todo es que me lo sigo creyendo.
Ojala te desprendieses de mi,
tu olor de mi piel (sin tener que utilizar gel)
tu voz de mi cabeza (sin tener que utilizar tranquilizantes para dormir)
tus besos de mis labios (sin tener que usar cacao)
Simplemente que un día te fueses y no estuvieses más en ningún sitio.
Y me da miedo.
Y no se que me da mas miedo.
Si el hecho de perderte
o el hecho de no poder amanecer más, de quedarme encerrada por tu culpa en el tiempo, caer en la rutina, olvidar en algún momento el amor y no poder marcharme.
Entonces me doy cuenta que no merece la pena, que si de verdad esto fuese amor no tendría prisa por amanecer, no me haría faltar dudar porque sabría que después de un amanecer viene otro.
Así que me quito de encima los brazos que me están rodeando justo en el momento en el que los primeros rayos de sol empiezan a mezclarse con mi pelo devolviendole poco a poco el blanco a las sábanas.
Por ti.
Por mi.
Porque algún día podamos amanecer sin prisa con alguien que nos quiera.
Así que voy a iniciar un viaje, allí, al punto en el que el amanecer empieza a crecer.